gente menuda, menuda gente

(el titulo no le va nada porque en este blog hablo de los nicaraguenses, que de menudos tienen lo que yo de nicaraguense, nada, vaya)
Escuchen,
No hay gente mas honrada y dadivosa que los nicaraguenses.Que hay de todo como en botica, cierto, pero la participacion y el sentimiento grupal son muy fuertes.

Ahi les regalo unas historietas.
Estaba sentada en la parte trasera del pick up del hotel junto con David, un senor que vive en Balgue y que es fundador de otra ONG. Martijn andaba haciendo compras en la distribuidora y Lisa estaba de pie apoyada en el coche, hablando con nosotros cuando de repente aparece la chica de la tienda y le dice da a David 35 cordobas (1 euro). “Esta manana me equivoque en el cambio y eso es lo que le faltaba” dijo ella en espanol y yo repeti en ingles para que se la quitase la cara de perplejidad a mi amigo. A esa cara le siguio una de sorpresa y una tanda de historietas similares a la que acababa de ocurrir.

Andaba en bus de Managua y tuve que hacer el cambio de bus en el cruce de Nandaime para desviarme hacia Granada. Acababa de llegar a Nicaragua del aeropuerto de San Jose y iba petada de trastos. Cuando baje por el porton trasero y andaba acomodandome el petate, alguien grito desde el bus. Balanceando la mano de atras adelante hacia senas para lanzarme mi paraguas. Le mostre mi despiste con una palmada en la frente y tras una palmada le indique que ya me lo podia lanzar. Primer dia en el pais y ya me estan devolviendo cosas que voy dejando por el camino.
Ibamos en un taxi y al rato Martijn se da cuenta de que no lleva consigo su sombrero. “Me lo he dejado en el taxi” me dice con cara de frustracion. Acto seguido llama a Pedro su amigo taxista del puerto de San Jorge que nos habia visto agarrar el otro vehiculo como segunda opcion porque el ya tenia un compromiso. “Ese sombrero es muy cercano a mi corazon” le suplica. En ese momento nuestro taxista andaba de ruta, Pedro no tenia su telefono y dejamos el recado de avisarnos cuando supusiese algo. A las dos horas recibimos la llamada con la buena noticia de que habia recuperado el sombrero.

La cocinera me ha regalado varios pantalones y camisetas de sus hijas. “Se estan poniendo pansonas” sonrie ampliamente mostrando sus dientes dorados.

A la casa que vayas te ofrecen la silla de colores chillones de plastico. Y si estas estudiando algun proyecto con ellos, antes de cualquier respuesta, positiva o negativa por parte de los donantes, ya te has comido varios bananos, naranjas, chapotes, mangos, aguacates, lo que toque en cada estacion.

El coche duerme con las puertas sin bloquear y la llave puesta. Mi bicicleta pasa la vida al relente sin correa. No hemos tenido puerta de entrada a la casa hasta hace una semana y llevo aca un ano y tres meses. La funda de la camara de fotos me la deje donde estaba Ines horneando pan. Al dia siguiente ya me estaba diciendo que ella la tenia en la pulperia. En la biblioteca prestamos libros a ninos.Todavia no se ha estraviado ninguno.

Mas de una vez en el autobus he tenido que volver a preguntar el precio del transporte, A veces te dicen un precio superior por ser gringa pero enseguida los pasajeros saltan en tu defensa para avisarte del precio correcto. Mis maletas las han puesto en mil lugares junto con otras mil maletas y dos mil personas, en la parte exterior superior del autobus, al final del vehiculo, en lugares donde no les podia llevar seguimiento pero nunca me ha faltado nada.

Y justo cuando termino de escribir esto, recibo un email de mi querida amiga Sandra que vive en Barcelona contandome que le robaron la cartera, que otro la encontraron, se esforzaron en contactarle y revibio finalmente una llamada de su padre, (el unico telefono que habria disponible en internet) para decirle en que bar se hallaba su billetera con la documentacion.

Espero Santa Claus sepa a quien tiene que repartir los regalitos!